A | Introducción del Secretario
Han transcurrido dos décadas desde que diez nuevos Estados miembros se adhirieron a la Unión Europea, marcando un hito histórico en el rumbo de nuestra institución.
Alfredo Calot Escobar
Secretario del Tribunal de Justicia
Han transcurrido dos décadas desde que diez nuevos Estados miembros se adhirieron a la Unión Europea, marcando un hito histórico en el rumbo de nuestra institución. Fueron momentos de celebración, pero también de retos sin precedentes. Volviendo la vista atrás, puedo afirmar con orgullo que no solo hemos superado esos retos, sino que, además, nos hemos ido fortaleciendo en el camino.
Hoy nos encontramos envueltos en transformaciones igualmente importantes dentro de nuestra institución.
Ha culminado el procedimiento legislativo para la transferencia parcial de las cuestiones prejudiciales al Tribunal General. Gracias a los inagotables esfuerzos de los dos tribunales y los diversos servicios, se han dado todos los pasos necesarios para garantizar su aplicación sin contratiempos.
Ese mismo espíritu de colaboración y adaptabilidad ha guiado asimismo nuestro empeño en otro ámbito crucial, el de la transformación digital. A lo largo de todo el año, hemos seguido progresando en nuestra competencia digital, desarrollando activamente proyectos impulsados por la IA, al tiempo que adecuábamos estas iniciativas a las exigencias del Reglamento de IA, que ha entrado en vigor este año. Reconociendo que el factor humano sigue siendo esencial para el despliegue eficaz de las herramientas de IA, hemos puesto en marcha un programa integral y a gran escala de formación en IA. Asimismo, nuestros servicios de traducción jurídica han tomado la iniciativa en el replanteamiento de los flujos de trabajo en un entorno digital más avanzado, estableciendo un modelo a seguir para otros servicios.
A medida que nos esforzamos por modernizarnos e innovar, garantizar la seguridad y la resiliencia de nuestras infraestructuras digitales se ha vuelto igualmente vital. Este año ha entrado en vigor el Reglamento sobre ciberseguridad, que introduce importantes obligaciones para nuestra institución, dentro de un estricto calendario.
Aun cuando abracemos la innovación, los ideales permanentes de nuestra institución siguen orientando nuestros esfuerzos. El fundamento de nuestro éxito reside en nuestro mayor activo: un equipo de más de dos mil personas entregadas procedentes de todo el continente, que trabajan armoniosamente cada día para impartir justicia. El auténtico valor de este esfuerzo colectivo radica en su diversidad; al combinar un amplio abanico de perspectivas, culturas, experiencias y talentos, refuerza nuestra capacidad para cumplir nuestra misión.
Con el fin de retener y atraer a los mejores talentos de todos los Estados miembros, han proseguido a lo largo del año las iniciativas destinadas a garantizar el atractivo de nuestro país anfitrión como lugar de trabajo. Por primera vez hemos asistido al reconocimiento político de las dificultades específicas a las que se enfrenta el personal de Luxemburgo en comparación con sus colegas de Bruselas. En un procedimiento no exento de complejidad, las autoridades presupuestarias accedieron a nuestra petición consistente en una asignación temporal para vivienda destinada a los colegas de las categorías salariales inferiores, un primer paso vital para remediar esta desigualdad.
Nuestro compromiso con la diversidad va más allá de nuestro personal. En 2024, hemos adoptado nuevas iniciativas, junto con la Red Europea de Formación Judicial, para optimizar el equilibrio geográfico de los profesionales nacionales de la justicia que participan en las sesiones de formación de larga duración del Tribunal de Justicia. Estos esfuerzos han dado resultados tangibles, con la presentación de candidaturas procedentes de tres nuevos Estados miembros por primera vez en los casi veinte años de historia del programa.
Ello demuestra asimismo nuestro constante empeño por reforzar el diálogo con los tribunales nacionales, principio que hemos seguido activamente a lo largo de todo el año. La Red Judicial de la Unión Europea ha dado otro paso significativo en el progreso del diálogo judicial: por primera vez se celebró la reunión de delegados fuera de los locales nuestra institución, organizada conjuntamente por el Conseil d’État belga, lo cual aportó una nueva perspectiva a la Red, reforzando la idea fundamental de que el diálogo judicial, por su propia esencia, trasciende las fronteras institucionales.
Junto a estos hitos externos, hemos vuelto nuestra mirada hacia el interior, reafirmando nuestro compromiso con las más estrictas normas éticas que han sido siempre una de nuestras señas de identidad. Este año hemos recopilado esas normas en un código de conducta aplicable al conjunto del personal, equiparando nuestros principios con las estrictas normas ya establecidas para los miembros.
Al igual que hace veinte años afrontamos los retos de la ampliación con determinación y una voluntad común, confío en que dentro de veinte años recordaremos las transformaciones actuales con idéntico orgullo. Los retos a los que hoy nos enfrentamos nos permiten adoptar las innovaciones que marcarán la senda de nuestra institución en el futuro, respetando las ricas tradiciones que han moldeado su pasado.
B | Principales acontecimientos del año
Transferencia parcial de la competencia prejudicial
Con el fin de permitir a los órganos jurisdiccionales de la Unión impartir una justicia de calidad en un plazo razonable y de lograr un mejor equilibrio de la carga de trabajo entre el Tribunal de Justicia y el Tribunal General, el 1 de septiembre de 2024 entraron en vigor importantes modificaciones del Estatuto y de las normas de procedimiento. Las modificaciones del Estatuto, propuestas por el Tribunal de Justicia, fueron aprobadas por el Parlamento Europeo y por el Consejo de la Unión Europea. Las de los Reglamentos de Procedimiento fueron adoptadas por el Tribunal de Justicia y por el Tribunal General, previa aprobación del Consejo. Estas modificaciones ponen en práctica la transferencia parcial de la competencia prejudicial al Tribunal General y modernizan los procedimientos ante ambos órganos jurisdiccionales.
Las modificaciones del Estatuto y su aplicación
Las modificaciones del Estatuto del Tribunal de Justicia de la Unión Europea hacen posible la transferencia parcial de la competencia prejudicial al Tribunal General a partir del 1 de octubre de 2024. Se trata de una posibilidad que ya existía desde el Tratado de Niza, firmado en 2001, y que volvió a ponerse de actualidad en el contexto de la reforma de la arquitectura jurisdiccional de la Unión de 2015, y, en particular, de la duplicación del número de Jueces del Tribunal General, que culminó íntegramente en 2022.
La competencia del Tribunal General para conocer de las peticiones de decisión prejudicial se ejercerá en una serie de materias específicas claramente identificables, que plantean escasas cuestiones de principio, y para las que existe un importante sustrato de jurisprudencia del Tribunal de Justicia que puede orientar al Tribunal General en el ejercicio de esta nueva competencia. Se trata, por otra parte, de asuntos prejudiciales que deberían dar lugar a un número de remisiones lo bastante significativo como para que la transferencia al Tribunal General alivie realmente la carga de trabajo del Tribunal de Justicia.
Estas materias específicas son el sistema común del IVA, los impuestos especiales, el código aduanero, la clasificación arancelaria de las mercancías, la compensación y asistencia a los pasajeros en caso de denegación de embarque o de retraso o cancelación de servicios de transporte y el régimen de comercio de derechos de emisión de gases de efecto invernadero.
Reparto de competencias entre el Tribunal de Justicia y el Tribunal General
Las modificaciones del Reglamento de Procedimiento del Tribunal de Justicia precisan, ante todo, el modo de tramitación inicial de las peticiones de decisión prejudicial con objeto de determinar el órgano jurisdiccional al que corresponde conocer de ellas. Seguidamente, establecen las disposiciones necesarias para garantizar una rápida tramitación de las peticiones de decisión prejudicial que el Tribunal General devuelva al Tribunal de Justicia por requerir una resolución de principio que pueda afectar a la unidad o a la coherencia del Derecho de la Unión. Por último, establecen las modalidades de publicación en línea, en un plazo razonable tras la conclusión del asunto, de los escritos de alegaciones u observaciones escritas presentados en los asuntos prejudiciales por los interesados mencionados en el artículo 23 del Estatuto.
Las modificaciones del Reglamento de Procedimiento del Tribunal General precisan el modo de tramitación de las peticiones de decisión prejudicial transmitidas al Tribunal General. Con el fin de ofrecer a los órganos jurisdiccionales nacionales y a los interesados mencionados en el artículo 23 del Estatuto las mismas garantías aplicadas por el Tribunal de Justicia, el Tribunal General reprodujo, en esencia, las disposiciones del Reglamento de Procedimiento del Tribunal de Justicia aplicables a las peticiones de decisión prejudicial, incluidas las relativas a la publicación de los escritos de alegaciones y las observaciones escritas presentados por los interesados.
Otras modificaciones importantes afectan a la estructura y organización del Tribunal General. Prevén la creación de una Sala Intermedia de nueve Jueces, presidida por el Vicepresidente del Tribunal General. Las peticiones de decisión prejudicial se atribuirán a Salas de cinco Jueces especialmente encargadas del conocimiento de estos asuntos, pero podrán remitirse a otra formación jurisdiccional en función de la importancia de las cuestiones planteadas.
Los Jueces que hayan de desempeñar las funciones de Abogado General en los asuntos prejudiciales (así como los que hayan de sustituirlos en caso de impedimento) son elegidos por el Tribunal General y asisten a la formación correspondiente del Tribunal en cada asunto prejudicial, siguiendo el modelo de participación de los Abogados Generales en los procedimientos ante el Tribunal de Justicia.
Por otra parte, el Tribunal General precisó las normas relativas a la protección de los datos personales, así como a las formas de presentación y notificación de escritos procesales en el marco de las peticiones de decisión prejudicial.
La magnitud de las modificaciones hizo conveniente la refundición de las Normas prácticas de desarrollo del Reglamento de Procedimiento del Tribunal General.
Las demás modificaciones de las normas procesales
Otras novedades tienen por objeto mejorar, simplificar y modernizar la tramitación de los asuntos por el Tribunal de Justicia y el Tribunal General, teniendo en cuenta la experiencia adquirida durante la crisis sanitaria. La más significativa para el Tribunal de Justicia es la posibilidad ―ya prevista por el Tribunal General― de que los representantes de las partes o de los interesados mencionados en el artículo 23 del Estatuto participen en una vista oral por videoconferencia, siempre que se cumplan los requisitos jurídicos y técnicos especificados en las Instrucciones prácticas a las partes. Por otra parte, el Tribunal General revisó una serie de disposiciones aplicables a los recursos directos, entre ellas las relativas al tratamiento confidencial de los escritos procesales, a la adaptación de la demanda en el transcurso del procedimiento y a las reglas formales que deben observarse para la presentación de escritos procesales.
Por último, en cuanto a la retransmisión de las vistas del Tribunal de Justicia, instrumento de transparencia y de accesibilidad de la justicia, una nueva disposición precisa el régimen aplicable a la retransmisión de las vistas de presentación de informes orales, de pronunciamiento de sentencias y de presentación de conclusiones de los Abogados Generales. El Tribunal General, por su parte, ha introducido disposiciones sustancialmente equivalentes.
Testimonio de Giulia Predonzani, adjunta al Secretario del Tribunal General
«Los aficionados a correr pueden considerar la reforma del Estatuto como esa maratón en la que todo corredor anhela participar algún día... y en la que lleva pensando más de veinte años. Para llegar a ella ha sido preciso recorrer varias etapas. En efecto, la culminación de la reforma de la arquitectura jurisdiccional del Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha proporcionado al Tribunal General los recursos y la estructura necesarios para tramitar las peticiones de decisión prejudicial con la debida celeridad. Pero no podíamos detenernos ahí.
Para correr esa maratón, el Tribunal General ha tenido que dotarse también de un marco reglamentario y práctico adecuado. En primer lugar, para tener en cuenta la participación de los órganos jurisdiccionales nacionales y de los interesados mencionados en el artículo 23 del Estatuto en los procedimientos prejudiciales, el Tribunal General no solo ha adaptado su Reglamento de Procedimiento y las Normas prácticas de desarrollo, sino también su decisión relativa a la utilización de la aplicación e-Curia, así como todos los textos de soft law: recordatorios, formularios y documentos informativos (omisión de datos en los procedimientos judiciales, modelos de demanda). Asimismo, el Tribunal General ha tenido que adoptar decisiones relativas a la composición y al funcionamiento de sus Salas y de sus distintas formaciones, incluida la nueva Sala Intermedia, y elegir a los Abogados Generales para la tramitación de las peticiones de decisión prejudicial. Por último, para implantar nuevos flujos de trabajo, el Tribunal General ha tenido que coordinarse con sus otros compañeros “maratonianos”, en particular la Dirección General de Multilingüismo, la Dirección de Tecnología Informática y la Dirección de Investigación y Documentación. Una etapa clave fue la creación de una “ventanilla única”: una aplicación que centraliza el análisis de las peticiones de decisión prejudicial susceptibles de transmitirse al Tribunal General. El fructífero diálogo con la Secretaría del Tribunal de Justicia, verdadero compañero institucional, ha sido una valiosa constante durante todo el “entrenamiento”.
Preparación, anticipación de las necesidades, trabajo de intensidad y de resistencia, todo ello dentro de un ambicioso calendario. En octubre de 2024, el personal del Tribunal General y de su Secretaría estaba listo, en la línea de salida, para correr esa maratón tan esperada. A finales de 2024, veintitrés asuntos han pasado por la ventanilla única y diecinueve han sido finalmente transferidos al Tribunal General. ¡La carrera continúa y... en plena forma!»
Vigésimo aniversario de la ampliación de 2004
El 1 de mayo de 2004, diez nuevos Estados miembros se adhirieron a la Unión Europea: la República Checa, Estonia, Chipre, Letonia, Lituania, Hungría, Malta, Polonia, Eslovenia y Eslovaquia. Se trata de la mayor ampliación, tanto en términos de población como de número de países, que ha experimentado la Unión hasta la fecha.
El impacto de la ampliación de 2004 en el funcionamiento de los órganos jurisdiccionales
De todas las sucesivas ampliaciones, la de 2004 fue la más significativa por su magnitud, con la incorporación, de una sola vez, de diez nuevos Jueces nombrados tanto para el Tribunal de Justicia como para el Tribunal General.
El impacto en el régimen lingüístico del Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha sido considerable. El número de lenguas oficiales pasó de doce a veintiuna, lo que se tradujo en un aumento exponencial del número de combinaciones lingüísticas, que pasó de 110 a 420.
La creación de los nuevos gabinetes y las nuevas unidades lingüísticas exigió un importante esfuerzo estructural, tanto en el plano inmobiliario como en el de la selección de personal, con la incorporación de varios centenares de colegas nuevos en el plazo de un año.
La contribución de los Estados miembros que se incorporaron a la Unión Europea en 2004 ha resultado sustancial: en veinte años, los tribunales de los diez Estados miembros que se adhirieron han presentado cerca de 1 300 peticiones de decisión prejudicial.
«Un nuevo momento constitucional para Europa»
Para celebrar este acontecimiento histórico, el Tribunal de Justicia organizó el 3 de mayo de 2024 un coloquio titulado «Veinte años de la adhesión de diez Estados a la Unión Europea: un nuevo momento constitucional para Europa», que congregó a jueces y representantes de todos los Estados miembros de la Unión Europea, con el fin de reflexionar juntos sobre la contribución del Tribunal de Justicia al avance del proyecto europeo y sobre la aportación de esos diez Estados miembros al ordenamiento jurídico común.
El coloquio del 3 de mayo, cuyas actas están publicadas en la página web del Tribunal de Justicia, abordó varios temas, entre ellos:
-
el proceso de adhesión de los nuevos Estados miembros tras la caída del muro de Berlín, que exigió una transformación fundamental en la legislación, la mentalidad y las culturas de los pueblos afectados;
-
los valores europeos comunes y la contribución de la ampliación de 2004 al desarrollo de la Unión como una «Unión de valores», y
-
la convergencia entre las economías de los nuevos Estados miembros y el resto de la Unión.
Las presentaciones de los ponentes y los debates con los participantes sirvieron especialmente para recordar que la Unión Europea es única por cuanto se basa en valores compartidos ―en cuya cúspide se encuentran la democracia y el Estado de Derecho― que ella y sus Estados miembros deben seguir defendiendo.
Palabras de Ineta Ziemele, Juez del Tribunal de Justicia, presidenta del grupo de trabajo dedicado a la organización del evento
«El principal objetivo de la conferencia que conmemoraba el vigésimo aniversario de la mayor ampliación de la Unión Europea era hacer balance del impacto y el cambio que esta ampliación ha supuesto para la Unión. Se consideró un momento propicio para reflexionar e intercambiar experiencias y enseñanzas sobre la forma en que ha evolucionado y se ha transformado la Unión en los últimos veinte años tras un hito histórico semejante.
Los órganos jurisdiccionales de la Unión, al preparar la conferencia, propusieron contemplar la ampliación de 2004 como un momento constitucional —un cambio de paradigma— que unió a la Europa Oriental y la Occidental en un proyecto constitucional común. La Unión Europea extendió sus valores y principios a lugares de Europa con historias particularmente complejas. Los diez nuevos Estados miembros se incorporaron a la Unión con una fuerte determinación y esperanza de libertad, justicia y prosperidad. La adhesión a la Unión fue un proceso complejo, no exento en absoluto de dificultades, y los países candidatos desplegaron un trabajo y unos esfuerzos ingentes para cumplir los criterios de adhesión (los denominados “criterios de Copenhague”), establecidos por primera vez por el Consejo Europeo de Copenhague en 1993.
Aquel día, hace veinte años, significó asimismo un cambio fundamental para la Unión en todos sus ámbitos de competencia. No fue siempre fácil prever en qué consistiría exactamente ese cambio, pero era evidente que existía un mayor potencial de crecimiento dentro de su mercado interior y una fascinante diversidad cultural, histórica y lingüística que inauguraba y acompañaba futuros avances políticos y jurídicos en el seno de la Unión. La Unión Europea ampliada se convirtió así en un actor global aún más importante.
Otra característica singular de la conferencia fue el hecho de que los órganos jurisdiccionales de la Unión invitaran a oradores de cada uno de los nuevos Estados miembros que hubieran participado directamente en el proceso de adhesión o hubieran sido personalidades destacadas con importantes responsabilidades en lo que respecta a la adhesión del Estado o a la propia Unión. La conferencia aportó una perspectiva interdisciplinaria a las reflexiones propuestas en esta ocasión por los órganos jurisdiccionales de la Unión.
Un magnífico repaso de la historia particularmente compleja y a menudo brutal de estos Estados, a cargo del profesor Norman Davies, puso el punto final a la conferencia. Fue un recordatorio necesario de que los valores de la Unión Europea no pueden darse por sentados y de que su permanencia y desarrollo exigen un importante esfuerzo por parte de todos en la Unión. Mientras reflexionábamos sobre estas enseñanzas, el coro de los dos órganos jurisdiccionales de la Unión entonaba canciones en diez distintas lenguas antes de concluir con la Oda a la alegría de Beethoven, que sigue expresando el ideal mismo de la Unión Europea: la unión fraternal de la humanidad.»
Un marco ético reforzado para el personal del Tribunal de Justicia de la Unión Europea
Dada la naturaleza de su misión, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea siempre se ha autoimpuesto las máximas exigencias de independencia, de imparcialidad y de integridad. El cumplimiento de estas exigencias, que son al mismo tiempo valores que fundamentan la identidad de la institución, es esencial para garantizar la confianza en la justicia europea y también su legitimidad. Por esa razón, el Tribunal de Justicia procura disponer de un marco jurídico interno que esté en consonancia con los más estrictos criterios deontológicos, con el fin de responder a las expectativas de ejemplaridad que recaen sobre una institución judicial.
En consecuencia, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha observado siempre unas normas éticas exigentes. Los miembros de la institución (Jueces, Abogados Generales y Secretarios) y todo el personal están sujetos a ellas, incluso después de haber abandonado el Tribunal de Justicia.
En un contexto en el que las expectativas de ejemplaridad de la función pública europea son cada vez mayores, el Tribunal de Justicia ha optado por seguir modernizando su régimen deontológico interno. Esta iniciativa, que comenzó ya en 2021 con la modificación del código de conducta de los miembros y antiguos miembros, prosigue hoy con la adopción de un código de conducta aplicable al personal.
De este modo, las normas ya contenidas en el Estatuto de los Funcionarios de la Unión Europea y en el Régimen aplicable a los otros agentes de las Comunidades Europeas (ROA), así como en una serie de disposiciones internas, se han ampliado, completado y adaptado a las exigencias judiciales en un código de conducta único para el personal que, tras su adopción por el Comité Administrativo, entró en vigor el 1 de marzo de 2024.
Basado en las reglas deontológicas que emanan de las diversas fuentes existentes, este código de conducta ofrece, en forma de instrumento único, un acceso fácil e inteligible a todo el personal al que se aplican dichas normas. En aras de la transparencia y de la seguridad jurídica, tiene por objeto interpretar estas obligaciones teniendo en cuenta las especificidades inherentes a la función jurisdiccional del Tribunal de Justicia y precisar la forma en que se aplicarán. Sigue un planteamiento ético, basado en los valores que guían la actuación de la institución, traducidos en normas de comportamiento ejemplares. El código también incluye normas especiales para los miembros de la dirección, teniendo en cuenta las responsabilidades específicas que asumen, y para los letrados, debido a la posición que ocupan para con los miembros del Tribunal de Justicia y del Tribunal General y a su implicación directa en las actividades jurisdiccionales. Estas normas hacen hincapié en que el deber de ejemplaridad es proporcional a las responsabilidades ejercidas y contemplan obligaciones específicas relativas a la prevención de conflictos de intereses y al ejercicio de actividades externas, incluso después de cesar en el puesto.
C | Relaciones con el público
16 319
visitantes de los cuales
3 985
profesionales del Derecho
Visitantes en formato virtual:
7 %
2 493
visitantes durante la jornada de puertas abiertas
Visitas a distancia — proyecto pedagógico
Este programa pedagógico a distancia tiene por objeto permitir a los estudiantes de secundaria de entre quince y dieciocho años descubrir la misión de la institución judicial de la Unión desde sus aulas, sin tener que desplazarse a Luxemburgo. El objetivo del proyecto consiste en sensibilizar a los jóvenes estudiantes de secundaria y a sus profesores sobre los valores democráticos y las cuestiones jurídicas de actualidad, y explicarles el impacto de la jurisprudencia del Tribunal de Justicia en la vida diaria de los ciudadanos europeos. En 2024, alrededor de 1 300 estudiantes tuvieron la oportunidad de visitar el Tribunal de Justicia en el marco de este programa.
Los responsables de prensa de la Dirección de Comunicación, juristas de formación, tienen como misión hacer más comprensibles las sentencias, autos, conclusiones y asuntos pendientes a los periodistas y corresponsales de todos los Estados miembros. Redactan comunicados de prensa para informar en tiempo real a periodistas y profesionales sobre las resoluciones del Tribunal de Justicia y del Tribunal General. Difunden, a quienes lo hayan solicitado al servicio de prensa del Tribunal de Justicia, boletines informativos periódicos en los que se anuncian acontecimientos procesales e institucionales importantes, así como «notas de información rápida» sobre los asuntos no cubiertos por comunicados. Atienden asimismo los correos electrónicos y las llamadas de los ciudadanos.
2 509
comunicados de prensa
610
boletines informativos
516
«notas de información rápida»
13 091
respuestas a solicitudes de información
de ciudadanos (llamadas telefónicas
y correos electrónicos)
El Tribunal de Justicia mantiene una presencia activa en las redes sociales a través de dos cuentas en X (una en francés y otra en inglés), LinkedIn y Mastodon. El número de suscriptores en estas redes no deja de aumentar, lo que demuestra el interés y el compromiso del público hacia la actividad del Tribunal de Justicia. El Tribunal de Justicia tiene asimismo un canal de YouTube en el que se puede acceder en las veinticuatro lenguas oficiales a contenidos audiovisuales variados, en particular animaciones para el gran público con el objetivo de explicar cómo impacta la jurisprudencia del Tribunal de Justicia en el día a día de los ciudadanos.
163 000
seguidores en X
+ 2 % con respecto a 2023
297 346
suscriptores LinkedIn
+ 26% con respecto a 2023
4 500
suscriptores Mastodon
600 000
visualizaciones en YouTube
+ 137% con respecto a 2023
En 2024, el Tribunal de Justicia publicó una nueva animación: Reparto de competencias entre el Tribunal de Justicia y el Tribunal General
Retransmisión de las vistas
Con el fin de facilitar el acceso a su actividad judicial, el Tribunal de Justicia ofrece un sistema de retransmisión de sus vistas. El pronunciamiento de las sentencias y la lectura de las conclusiones de los Abogados Generales se retransmiten en directo a través del sitio web, siguiendo el horario indicado en el calendario judicial. Las vistas orales de la Gran Sala del Tribunal de Justicia se retransmiten asimismo en diferido.
Las grabaciones están disponibles durante un mes.
Antes de la retransmisión de las vistas orales, se emite un breve informe explicativo del asunto en las lenguas de la vista y se publica en la página web del Tribunal de Justicia y en las redes sociales. En 2024, se emitieron un total de 29 informes.